mius, mius, mius!
44.000 personas... se dice pronto, eh, aunque estoy segura que detractores como J.M. verán el Estadio como la copa media vacía en vez de cómo lo vi yo, plena y pletórica, vibrante, ya que no se vendieron todas las entradas.
Con apenas 1 hora y media de cola pude estar en primera línea vibrando con el fabuloso sonido de Muse. Mius, mius, mius, mius - sonaba impaciente el coro del público a las 22.00 en punto - nos hicieron esperar 20 minutos que olvidamos enseguida en cuanto comenzó a sonar Uprising -
Pero antes... todo el día mirando al cielo, deseando que lloviera cuanto antes y la tarde quedase despejada, la verdad es que fue una bendición gozar de un concierto casi en verano entre tantísima gente sin el sol agobiando y con fresquito, aun así todos sudamos bailando y cantando a coro con los autores de las vibraciones que tanto nos gustan, no se trata de jalear a ningún sumo sacerdote, sencillamente es dejarse llevar atraido por el gozo ancestral que nos causa el baile y la música. Os garantizo que el rock & roll está vivo! yeah!
Big Pink abrió el concierto más que puntuales, antes de las 20.00 h, fueron una muy agradable sorpresa, me gustaron mucho a pesar de tan sólo deleitarnos con tres temas. Akiko Matsuura, la batería del grupo, japonesa of course, nos regaló su trasero al finalizar y nos lanzó sus palitos. Todo apuntaba a una noche fabulosa, la Luna comenzaba a asomar entre las nubes y el resplandor de la tarde. Sonaba potente la música, flotaba la cordialidad y muy de vez en cuando aromas de marihuana y hachis.
Siguieron, los también ingleses, The Editors y yo encantada
Y al fondo... protegida entre lonas oscuras y plateadas el volumen de la batería de Dominique nos llenaba de gozo anunciando lo mejor por llegar....
Con apenas 1 hora y media de cola pude estar en primera línea vibrando con el fabuloso sonido de Muse. Mius, mius, mius, mius - sonaba impaciente el coro del público a las 22.00 en punto - nos hicieron esperar 20 minutos que olvidamos enseguida en cuanto comenzó a sonar Uprising -
Pero antes... todo el día mirando al cielo, deseando que lloviera cuanto antes y la tarde quedase despejada, la verdad es que fue una bendición gozar de un concierto casi en verano entre tantísima gente sin el sol agobiando y con fresquito, aun así todos sudamos bailando y cantando a coro con los autores de las vibraciones que tanto nos gustan, no se trata de jalear a ningún sumo sacerdote, sencillamente es dejarse llevar atraido por el gozo ancestral que nos causa el baile y la música. Os garantizo que el rock & roll está vivo! yeah!
Big Pink abrió el concierto más que puntuales, antes de las 20.00 h, fueron una muy agradable sorpresa, me gustaron mucho a pesar de tan sólo deleitarnos con tres temas. Akiko Matsuura, la batería del grupo, japonesa of course, nos regaló su trasero al finalizar y nos lanzó sus palitos. Todo apuntaba a una noche fabulosa, la Luna comenzaba a asomar entre las nubes y el resplandor de la tarde. Sonaba potente la música, flotaba la cordialidad y muy de vez en cuando aromas de marihuana y hachis.
Siguieron, los también ingleses, The Editors y yo encantada
Y al fondo... protegida entre lonas oscuras y plateadas el volumen de la batería de Dominique nos llenaba de gozo anunciando lo mejor por llegar....
2 comentarios:
Casi lo oi desde casa....
Bxos
¿Detractor yo? No exageremos. Vamos a dejarlo en "discrepante"...
No todo el mundo reune 44.000 personas. No voy a quitarle mérito al espéctaculo.
Me alegro de que hayas disfrutado de tu concierto.
JM
Publicar un comentario