lunes, febrero 19, 2007

Me gusta el Teatro

Hoy, ayer ya...

...hace tres horas ya, cuando era domingo, salia del teatro.

"La cabra" me ha hecho sentir y disfrutar muchísimas sensaciones y sentimientos.

Toda una metáfora para plasmar la batalla interior entre lo inexplicable del deseo y las normas sociales, el eterno conflicto que tantas y tantas veces impide al ser humano ser feliz.

El amor loco incomprensible e incomprendido, y el amor en sí mismo, en todas sus formas.

Me ha encantado, mucho, todavía estoy paladeándola, uhm...






La Cabra és una història
d'amor.
Una història d'amor
"diferent".
És una comèdia que fa riure
i és una tragèdia desoladora.

És teatre convencional
i és teatre de l'absurd.
És pura poesia i és
una barroeria salvatge.
És una humorada.
Una riallada animal.
Un acudit que ningú no sap
com acaba.
L'història d'una soledat
i de molt males companyies.
És la sorpresa, la batzegada,
l'incredulitat, el dubte.
La provocació pura i dura.
És la "prova del nou" per a
la tolerància i la comprensió.

És el cor obert a la irracional
naturalesa de l'amor.

És la por i la perversió.
És el desig.

I és la millor obra de teatre
que m'ha caigut a les mans
des de fa molts anys.

La Cabra es una historia
de amor.
La Cabra es otra historia
de amor.
Es una comedia de risa,
mucha risa, y a la vez
una tragedia desoladora.
Es teatro convencional y a
la vez teatro del absurdo.
Es poesía pura y dura y a
la vez chafarrinón salvaje.
Es una humorada.
Una risotada animal.
Un chiste que nadie sabe
como acaba.
La historia de una soledad
y de muy malas compañías.
Es la sorpresa, el asombro,
la incredulidad, la duda.
La provocación pura y dura.
Un manual de uso para el
ejercicio de la tolerancia
y la comprensión.
La evidencia indiscutible
de la irracional y poderosa
naturaleza del amor.
La medida imposible de los
límites del deseo.

Y es la mejor obra de teatro
que ha caído en mis manos
en los últimos años.


Josep Maria Pou










Con todo mi cariño a Higiénico Papel Teatro, los conocí en el Círculo de Bellas Artes en septiembre del 2000 con "El desván de las horas muertas", obra de Laura, ¡qué orgullosa estoy de ella!, una preciosa historia, entrañable.

Me acordé muchísimo de ti damita, no había vuelto a aquél escenario desde entonces.
Ya va tocando veros.

Un abrazo




**********



Y un recuerdo a Woody Allen y a Gene Wilder por la película "Todo lo que quiso saber sobre el sexo y nunca se atrevió a preguntar", quién no recuerda aquella tierna historia del psiquiatra que se enamora de la oveja, ¿eh?, ¿eh?

4 comentarios:

Antonio Ruiz Bonilla dijo...

Gracias por tú visita, tu blog es genial. Un saludo y hasta pronto.

una mujer dijo...

je, eso se lo dices a todos...

Anónimo dijo...

A mí también me gustó la obra, me pareció chocante e imaginativa. Pero no sé si ví la misma obra que el resto del público. ¿Qué buscaba la gente que fue a verla? ¿Reirse o reflexionar? ¿Porqué algunos se reían en los momentos más dramáticos? ¿Porqué los actores jovenes gritan tanto? ¿Porqué los gays siempre tienen que parecer alocados e impulsivos?

Tú, que siempre vas por delante, parece que me sigues los pasos..jeje

Bss
JM

una mujer dijo...

será porque no me dejaste acompañarte

; )