Recetas en domingo
No necesita cocciones, ni sal ni pimienta. No se te ocurra pelarlo, perdería todo su sabor. Puedes untarlo de chocolate, de miel, nata, o simplemente saborearlo de forma natural.
No lo muerdas por favor, al menos no fuertemente. Empieza con suaves besos, con un dedo puedes tantearlo y así ir descubriendo su suavidad, su tersura, su dureza atrayente. Usa la lengua, lame este fruto inagotable, succiona para extraer toda su esencia, te regalará muchas satisfacciones, gozos y sonrisas. Sé curiosa, usa tus manos, tus dedos, embadurna con él todo tu cuerpo....
Bon appétit
2 comentarios:
mmmh... y yo que todavía no he cenado... me está entrando hambre ;)
Me encanta que no me desees solo por mi inteligencia. Yo también echo de menos Lavapies. Salud y placer.
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